Desde el cierre de “La Xóchitl”, nosotros como vecinos y clientes asiduos del lugar, nos dimos a la tarea de rescatar y mantener viva la mítica cantina.

Así nace “La Joya”, con la esencia e identidad propias de la leyenda de 116 años, pero iniciando una nueva historia. En “La Joya” queremos recuperar el conocimiento heredado por nuestros ancestros y mantener vivas nuestras raíces.

El pulque que servimos en fríos vitroleros es traído de Otumba, Estado de México, un lugar también reconocido por la buena calidad de sus bebidas fermentadas de savia. Además queremos darle al destilado de pulque el lugar que se merece, como un tesoro gastronómico, creando tres cocteles que podrás disfrutar cada que nos visites.